Vais a decir que soy una ñoña ñoñísima pero a estas alturas
ya hay confianza y he perdido la vergüenza y todo.
Yo confieso que soy fan de la gatita esta dibujada que tiene
merchandising por un tubo. Ya sabéis de la que os hablo. Sí, de esa gatita.
Me di cuenta de que mi obsesión comenzaba a alcanzar límites
preocupantes la otra mañana, por culpa de una alergia. No pongáis esa cara. Por
culpa de una alergia.
Nunca he tenido alergia en primavera pero este año se ve que
mi organismo ha optado por ser original y
ando por la vida convertida en un saco de mocos y lagrimones ambulante.
La estampa no me ha quedado muy glamourosa pero es lo que hay, las divas
también tenemos mocos, desengañaos.
El asunto es que estaba yo sentada frente a mi portátil rosa
super fashion horterísima de la muerte que me tiene loquita de amor y, de
repente, me dio por percatarme de todos los artículos de la felinilla que había
encima de la mesa. A saber: El ratón del ordenador, la funda del móvil, una
caja de tissues que había traído desde el baño porque andaba yo en pleno ataque
de alergia y un paquete de pañuelitos de papel para que no se me olvidase
echarlos al bolso. Da hasta penita sonarse la nariz sobre la estampa de la
pobre gateja, tan mona con su lazo en la cabeza peeero…
Pues eso. Que cuando vi todos esos objetos juntos en plan
concentración fue cuando comencé a caer en la cuenta de lo grave de mi adicción
a la bicha.
Porque la cosa no termina ahí, claro. Si me pongo a recorrer
mi casa encuentro braguitas, calcetines, neceseres, frasquitos de body splash,
brillo de labios, un cepillo para el pelo, un espejito, una sudadera, varios
pijamas y seguro que algo más que no recuerdo.
En mi mesa del trabajo también está presente. Tengo un block
de notas, regalo de mi jefa que me conoce como si me hubiese parido (y que el
otro día me trajo hasta un huevito de pascua con su forma, que me dio hasta
pena comerme pero que al final me zampé sin remordimientos) y dos figuritas
meramente decorativas (una de ellas regalada por una compañera y otra que
compré yo misma en un ataque de adicción).
A todo esto, yo me pregunto ¿qué tiene la gata esa que
engancha de semejante manera? Su diseño es más simple que el de un chupa chups
y, sin embargo, he llegado a ver hasta papel de cocina y papel higiénico con su
careto estampado. Por más que lo he intentado, no he conseguido convencer al
churri para comprarlo. Dice que esa batalla no la ganaré. Que ya bastante
invadido se siente, el pobre.
El colmo del freakysmo (aunque lo digo por puñetera envidia
ya que, de tener dinero, seguro que yo sería una víctima usuaria más) es un avión.
Como lo leéis. Un avión de la gateja. Con su tarjeta de
embarque, sus azafatas vestidas de no sé bien qué (van como de camareras de
hotel pero con la personajilla estampada en mitad del pecho), los protectores
de los asientos, los vasos, las cajitas de la comida, los sobres de azúcar, las
toallitas húmedas, el jabón del baño y hasta una magdalena que tendrá el mismo
destino que mi huevito de pascua.
Vamos, que quien diseñó este fenómeno, debe estar frotándose
las manos a la voz de “Comprad, mortales, comprad”. Ole por él, gracias a gente
como yo debe de vivir como un marajá.
Me despido mientras me sueno mi dolorida napia con uno de
los susodichos pañuelitos de papel que, para completar la cursilada, son
perfumados.
Esto es la moda de ahora, con 9 años tenía yo una camisola de la gatita y nadie se acordaba de ella asi que... y también está el fenómeno de el gato cosmico (que me acompaña en mis dulces sueños a la hora de la siesta) que ahora hay una peli de él que está viendo el futuro en la cama.
ResponderEliminarPero vamos que yo te acompaño también, que a mí los dibujitos me encantan y que me descargué David el gnomo y lo ví encantada...
Lo mío ha sido de toda la vida. No es cosa de ahora, no te vayas a creer. Son años y años de adicción...
EliminarAyyy, David El Gnomo!!! Ese final traumatizó nuestra infancia... Yo tenía hasta la enciclopedia. Jajaja. Un besote.
jajajjajajajajajajjajaa...me parto.....pues hoy he visto yo los dichosos suenamocos de la gatita en cuestión y he pensado..."joder, ya no saben ni qué sacar" y mira tú por donde, que si los hacen es porque hay gente que los compra :-P
ResponderEliminarBesos
Sí, y esa gente soy yo!!! Jajaja. Besos.
EliminarPues la diseñó una mujer, china o japonesa no recuerdo bien. Hya una historia rocambolesca por internet, que no sé si será real o no pero te la cuento que el cotilleo no tiene base científica.
ResponderEliminarEl caso es que esta mujer tenía una hija que tenái un cancer en la boca. Ya desesperá del tó pues hizo un pacto con el diablo, él le curaría el cancer a su hija y ella a cambio haría una muñeca que volvería loca a la gente por ella, que sería una gatita blanca. La mujer esta muy inocente ella pensó que su hija saldría de rositas con el pacto pero ya sabes que el diablo no es muy bonachón y le curó el cancer pero la dejó muda. Y por esta razón esta mujer hizo a la gatita sin boca.
Ahora te cuento mi última como primicia, porque lo publicaré en mi blog en breve: he hecho galletas monísimas de la hello Kitty que da pena comerlas, ya verás las fotos, mi hermana las que le tocaron las ha guardado, en mi cas ano queda ni una claro...jajaja.
Espero que la historia no sea cierta porque da un yuyu... Ya investigaré.
EliminarEstoy deseando ver las fotos de tus galleticas!!! Un besote.
Venga va, te lo voy a contar... hace un par de años, embarazada del primero, y desde el total convencimiento de que el gremlin iba a ser "la gremlin", mi madre y yo le hicimos una colección de cromos que por entonces lanzó Panini. Mi madre me daba dinero para comprar sobres y yo iba al quiosco. Es decir, igual que veinte años atrás. A veces compraba yo los sobres, pero cuando iba con su dinero era total. En fin, que cuando nos quedaban 5 o 7 cromos pedimos por internet a Panini los que faltaban para terminar la colección. Como debe de ser.
ResponderEliminarLuego poco a poco me he ido saturando, pero quien tuvo retuvo, y yo de momento tengo una colección de Panini nuevecita esperando a la Tamagochi (por cierto, menos mal, porque ya veia a mi madre enseñándosela al Gremlin con tal de amortizarla...).
Saluditos ;)
Jajajaja. No conocía yo tu lado oscuro!!! Gracias por compartir tus intimidades conmigo XD.
EliminarUn besote.
Oh no, si ya has llegado al extremo de comprar pañuelos de papel estampados, no hay nada que se me ocurra decirte que te pueda ayudar jajaja
ResponderEliminarSí, yo creo que lo mío ya no tiene vuelta atrás... Besotes.
EliminarYo le tengo un poquito de coraje, pero igualmente tengo varias cosas de la gatita, todas regaladas, jajaja. Que te mejores de la alergia!! Besos
ResponderEliminarMuchas gracias!!! Ya parece que voy un poco mejor y le estoy dando un respiro a la gatuela.
EliminarBesotes.
Yo también amo a la gata. En Japón creo que es, hay un hospital entero de ella xD
ResponderEliminarNo fastidies... Ese dato no lo tenía!!! Tengo que investigar pero ya!!! Besotes.
EliminarOhhh! es cierto acabo de ver fotos y es una pasada de mono! Por lo visto es un hopital de maternidad y con incubadoras y todo! Imagínate dar a luz ahi!! Tu que no quieres tener hijos podría ser una motivación para animarte! jajaja.
Eliminarhttps://www.google.es/search?q=hospital+hello+kitty&hl=es&client=firefox-a&hs=Iiy&rls=org.mozilla:es-ES:official&prmd=imvns&tbm=isch&tbo=u&source=univ&sa=X&ei=yfp2T_3fDcLG0QXB38m7DQ&ved=0CDMQsAQ&biw=1440&bih=781
Un poco abigarrado, ¿no? ¿O será que sigo buscando excusas para no ser madre? Besos.
EliminarYa que hay que confesar, diré que yo soy totalmente anti rosa, antimuñequitos, etc, total una amargada sin infancia creo...jajaja, no es cierto, no llego a tanto, pero creo que el rosa no va conmigo. Sin embargo, debo confesar que antes estaba loca por Igor de Winnie the Pooh,llegué a comprarme hasta pantuflas de él y Odi de Garfield,así que te comprendo (pero poco porque no llegue a tus extremos, jejeje), aun sigo teniendo alma de niña, porque caricaturas si que veo, siempre será mi favorita Candy, Candy, y ahora que lo pienso he desarrollado una debilidad por los Padrinos mágicos, pero me descargo en mi salón de clases, mi casa no ha sido invadida todavía, jejeje. Hace poco menos de dos años, a pesar de que nunca me ha gustado el rosa, me compre una laptop hp rosa, porque me encantó el diseño, yo la hubiera preferido azul pero era lo que había, todavía la tengo, al principio me daba mucha vergüenza salir con ella, me sentía un tanto cursi, noña, pero todo mundo la veía y me la "chuleaba", no resistían la tentación de tocarla y preguntarme dónde la había comprado, así que me acostumbré a ella (luego la sacaba sólo para presumirla xD), ahora en diciembre se le cayó a mi hermana y se dañó, he tenido que reemplazarla por una color turquesa, tb divina de la muerte como dices tu, pero me duele deshacerme de mi rosita, porque yo les pongo nombres.
ResponderEliminarYo es que debo tener cierto síndrome de Peter Pan...
EliminarGarfield también me encanta desde pequeña (y tengo muchas cosas de él también). Candy Candy era un auténtico culebrón para niños, jajaja.
Yo adoro mi portátil rosa super fashion horterísima de la muerte que me tiene loquita de amor, aunque no le he puesto nombre todavía. En turquesa tiene que ser una chulada también. Un besote!!!
Nena, puedes ser perfectamente la heroína de mis hijas, a ellas también les pierde la gatita.
ResponderEliminarTiene algo que engancha, aunque aún continúo preguntándome qué será... Jajaja.
EliminarLo de tus hijas no me extraña. Siempre que algún compañero de trabajo lleva a sus hijos a la ofi, se quedan como pegados a mi mesa, viendo la barraca de feria que tengo ahí montada, jajaja. Un besote.
Hola Mi Álter..las adicciones se curan con el tiempo..pero esta te llevará al menos siete vidas.....
ResponderEliminarGracias amiga, pasa buen día, besos felinos..
A esta ya le veo yo difícil solución... Un besote.
EliminarLo del avión es too much. Busca imágenes por ahí. Vas a alucinar!!! Por ahí arriba me ha informado Eva de Opiniones Incorrectas que también hay un hospital. A ver si esta tarde saco un ratillo para buscarlo, que eso hay que verlo!!!! Un besote.
ResponderEliminarOsti, pues sí que te ha abducido, sí...En mi caso sólo he vivido una vez la locura coleccionista y no me duró mucho, pero tenía taza, camiseta, libro, peli...de Drácula, jejeje. Muas!
ResponderEliminarLos vampiros siempre me han gustado un montón. Pero los vampiros de verdad, no el sinsentido de Crepúsculo, jajaja. Un besote.
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