Marrameowww!!!
Una forma de poner nerviosa a la bruja, como he contado alguna
vez, es hacer que se levante a darnos de comer a horas intempestivas en fin de
semana. Sobre todo porque, una vez que se levanta de la cama, ya no es capaz de
volver a ella, así que mola eso de conseguir que no pueda dormir ni siquiera
los días destinados a ello. Tengo que reconocer que, este fin de semana pasado,
la cosa no me salió demasiado bien. El sábado la hice levantarse a las ocho y
media, lo cual estuvo bastante bien pero el domingo, la verdad sea dicha, se me
fue la pata. Empecé a molestar a las seis y media de la mañana y, por lo visto,
a esas horas no estaba dispuesta a
levantarse por nada en el mundo. Al final se levantó el consorte, nos dio de
comer y se volvió a acostar (porque el consorte sí que no tiene problemas para
conciliar el sueño). A las nueve empecé a molestar otra vez y ahí sí se levantó
la bruja. Fue un pequeño triunfo pero igual pienso que no estuve fino del todo
en la ejecución de mi plan. Todo buen líder estratégico debe ser capaz de
aprender de sus errores. Lo dijo Maquiavelo, o Sun Tzu o tal vez lo leí en un
sobre de azúcar.
Pero todo esto no importa porque esta semana ya me había
marcado un buen tanto en mi misión de desquiciarla. Una de estas tardes, la
bruja volvió de trabajar, nos saludó como hace siempre (como si a nosotros nos
importara) y se fue a cambiarse los ropajes y quitarse las cuatro capas de
revoque que se echa en la cara, dejando a la vista el monstruo del inframundo que
realmente es. Para cuando salió del baño, me buscó y no me encontró. Dio vueltas
por la casa, mirando primero en las habitaciones que estaban abiertas. Al no
hallarme, pasó a revisar las que estaban cerradas, por si me hubiese yo colado
en un despiste. Como seguía sin encontrarme, repitió el proceso con los pasos
(y la respiración) cada vez más acelerados, mirando también dentro de los
armarios porque conoce mi afición a arañarle la ropa y demás pertenencias. Yo
no aparecía por ningún lado y yo la oía farfullar “Tiene que estar en casa
porque lo he visto al entrar y la puerta la he cerrado. Porque lo he visto, de
eso estoy segura. Lo he visto, ¿verdad?, ¡¡¿¿verdad??!!”. Entre frase y frase de su soliloquio,
intercalaba “Pequeeeeeee” y “pspspspspspsps” (dicho sea de paso, no sé para qué
hacéis ese sonido los humanos, si nunca hacemos ni caso).
Finalmente, me descubrió al asomarse a la estantería de la
entradita y encontrarme agazapado tras los libros, los cuales había sido yo
capaz de saltar sin descolocar ni uno.
Una vez descubierto y viendo que la bruja ya estaba
tranquila, ya no tuve tanto cuidado y los descoloqué al salir, que así la tenía
otro ratito entretenida.
Prrrrrr.
estabas entre libros, siempre te he tenido por un gato intelectual. a veces los humanos agitamos la caja o bolsa de pienso para hacer salir al gato de su escondrijo. no sé si ella también tiene ese truco. ;)
ResponderEliminarIntenta no usarlo porque el imberbe no admite bromas con ese tema.
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Hola! Por un momento he llegado a pensar que te habías metido en algún bolso, jajaja. Tienes razón, por mucho que hagamos el sonido de pspspsps no sirve de nada, jejeje.
ResponderEliminarBesos!
No, en el bolso sólo le hago pis, como ya conté una vez.
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Anda, mira que la haces sufrir a la pobre... Pero lo que más me ha dolido es que le descoloques los libros...
ResponderEliminarBesotes!!!
Pues ahí se tiró un rato volviéndolos a colocar. No soporta ver nada que no esté milimétricamente cuadrado.
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Por tu comportamiento se diría que más que un macho felino eres un macho caprino.
ResponderEliminarBonito juego de palabras pero la orientación de mis pupilas da fe de que no lo soy.
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Mi gatito también es maestro del camuflaje. Un beso
ResponderEliminarYo reconozco que a veces fallo y se me ve el rabo o las orejas. Aunque el imberbe falla siempre, así que ni tan mal.
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Mira que he tenido un gato loco en casa, dos años, ahora lo tiene mi hijo mediano, quien lo trajo a casa, pero el tuyo es maquiavélico donde los haya. :-)
ResponderEliminarSon muy suyos, tanto que nosotros, sus humanos y por tanto de su propiedad, o tenemos paciencia o nos vuelven locos, pero de verdad :-). Un abrazo
Yo no soy un gato loco. Soy un gato perverso (y, según cumplo años, cada día más).
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Jajajaja qué maldad la tuya, me has recordado a cuando mi hermana y yo hicimos creer a mi madre que nos habíamos caído por la ventana, eso es de mala gente.
ResponderEliminarBesos.
Todavía no me ha dado por fingir un accidente pero tengo que practicar en ese aspecto.
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Lo que hay que hacer para que no se aburra verdad?
ResponderEliminarEs una lucha diaria.
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" Ser del inframundo", pero bueno, Forlán, qué malo eres, no todos podemos ser tan bellos como tú.
ResponderEliminarMuy bueno el escondite, y sin mover los libros, tiene su mérito.
Prrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr
Me voy perfeccionando con los años (en cuanto a belleza también).
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Si que eres malo gatito, eh!!! Flor de susto le habrás dado así a la bruja…
ResponderEliminarYo creo que hace puro teatro para dar pena. Es mala persona.
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Lo de esconderse y ver a los humanos desquiciarse es divertidísimo. Y cuando te encuetran al fin, pones cara de inocente, como que contigo no va la cosa. Me hace gracia ese debate que tienen entre comerte a besos por la alegría de verte o darte un azote por haberte escondido y no responder al pspspsps...
ResponderEliminarMi escondite favorito es el carro de la compra, pero creo que empieza a estar visto, tengo que pensar alguno mejor.
Un cabezazo, prrrrr
RON :3
Detrás de los libros es buena opción, visto el resultado. Yo ahí lo dejo.
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Parece que lo estás logrando, por lo que Alter escribió como presentación de tu entrada.
ResponderEliminarTenés talento para la escondida, te felicito.
Y ahora entiendo de donde salió esa mención a Maquiavelo, por un inclinación literaria. Por lo menos usaste a los libros como escondite.
Bien contado.
PD: Lo de lo gatos y lo escondite tiene su tradición el cine. Como muestra una escena de Alien, que termina en con un plano detalle de los ojos de un gato.
La bruja no escribe nada en mis entradas. Es todo mérito propio.
EliminarSoy un gato muy culto, aunque no lo parezca.
Prrrrrrrr.
Me pasa lo mismo pero con mis perritos, y me sienta fatal , besotes ;)
ResponderEliminarEso es que están haciendo bien su trabajo.
EliminarPrrrrrrrr.
Eres un gato muy pero muy bribón ¿eh bicho? Te felicito. Haces la vida más amena de la bruja no que mi Calixto se la pasa durmiendo todo el día.
ResponderEliminarsaludos bicho
Si en el fondo lo hago por ella. Me puede el altruismo.
EliminarPrrrrrrrrrr.