Hay que ver lo que me cuesta comenzar a relatar estas memorias.
Si ya sabía yo que el portátil me lo había llevado por algo… Para que luego no
se me olvidase el orden de los acontecimientos.
Ahora mismo tengo un batiburrillo de imágenes que no sé qué
iba antes y qué iba después así que, para ir inaugurando la sección (prometo
que intentaré no prolongarla durante demasiadas semanas, que no quiero resultar
cansina), os cuento medianamente cómo fue el viaje de ida.
Salíamos de la terminal 4 Satélite de Barajas. Nos habían
puesto sobre aviso de que fuésemos con bastante antelación porque había que
coger un trenecito y se tardaba una eternidad en llegar a las puertas de
embarque. Total, que nos fuimos con nuestras buenas tres horas de adelanto y,
ya en el mostrador de facturación, nos dieron la primera sorpresa diciendo que
no les quedaban asientos juntos. Ole. Doce horas cada uno en una punta del
avión. La cosa prometía.
Nunca había estado en la T4 pero la cosa se veía como muy
moderna, aunque te decían todo el tiempo que estuvieses atento a los
indicadores, porque no se anunciaban vuelos por megafonía. Los indicadores
brillaban por su ausencia en la mayoría de los casos. Total, que cogemos el
famoso trenecito, que tardó cinco minutos de reloj en llegar a la zona donde
estaban nuestras puertas de embarque. ¿Qué había en esa zona, aparte de puertas
de embarque? Free Shops. Mírales qué listos… Te dicen que vayas mil horas antes
para que te ataque el espíritu consumista. Por cierto, el tabaco en el Free
Shop estaba más caro que en el estanco. Si alguien me lo puede explicar, le
estaré eternamente agradecida.
Como digo, los indicadores brillaban por su ausencia así que
tu número de puerta de embarque se lo tenías que preguntar a un pibe que habían
colocado detrás de un mostrador. Tanta modernidad para esto…
Por fin comenzaron a llamar. Por filas. De las últimas a las
primeras para hacerlo ordenadito pero, como Spain is different, todo el mundo
se agolpaba en la puerta para aumentar el caos y conseguir así que la salida
del vuelo se retrasase cuarenta y cinco minutos. Con un par.
Dicen por ahí que se permite un bolso de mano por persona,
así que a mí que me expliquen por qué yo, que subí de las últimas porque iba en
una de las primeras filas, no tenía sitio para poner mi trolley. Las
matemáticas no me cuadran. Una azafata maja le consiguió sitio al trolley en
Business. Estuve a punto de decirle que no tenía inconveniente en ceder al
trolley mi asiento en Turista y mudarme yo a Business pero me dio que no iba a
colar.
Todo el viaje estuvimos con el viento de morro, lo que hizo
que nos retrasásemos una hora más. Finalmente, con los pies hinchados, los ojos
inyectados en sangre por la falta de sueño y una sensación general de no estar
en este mundo, aterrizamos en Uruguay. No se lo digáis a nadie pero se me
escapó más de una lagrimilla en el momento del aterrizaje. No podía creer que
eso realmente estuviese pasando.
Mientras yo compraba tabaco en el Free Shop de Montevideo
(que ahí sí que valía la pena comprarlo), el churri fue a por las maletas y,
tras comprobar con gran algarabía que no faltaba ninguna y que no nos habían
metido cocaína en ellas como pudimos verificar gracias al scanner, salimos
finalmente. Mi madre aguardaba con lágrimas en los ojos. Yo me hice la fuerte,
que luego la gente comenta.
He de puntualizar que yo esperaba llegar y ver el sol, notar
el calorcillo sobre mi piel, empaparme de ese fin de primavera que tanto
ansiaba. Empaparme, me empapé. Pero de lluvia. Hacía un tiempo asqueroso.
Uruguay nos recibía con los brazos abiertos.
Tomamos un taxi rumbo a casa de mi mami. Íbamos por Avenida
de las Américas y pude constatar que, donde hubo bustos de próceres hace once
años, ahora sólo había pedestales. Los bustos fueron robados para vender el
bronce. Qué bonito todo. Durante el trayecto me llamó mi tía, quien me notificó
que el día anterior había hecho un día buenísimo. Una información de lo más
útil para aquellos que gusten de vivir en el pasado.
El cabreo por la lluvia y los próceres robados se me pasó
cuando vi la Rambla. Mi Rambla. Mi Río de la Plata (todo revuelto, por causa
del mal tiempo, pero mi Río de la Plata al fin y al cabo).
Cuando llegamos finalmente a casa, mi madre me preguntó
dónde quería ir a comer. No me lo pensé dos veces. Le dije: Quiero pizza y
fainá (el fainá es algo muy típico de allí, hecho en base a harina de garbanzo.
Odio los garbanzos pero al fainá se le perdona todo). Pues allí que fuimos. La
pizza de allí es muy diferente. Rectangular, para empezar, y como muy simplona
pero está tan rica que al primer bocado casi tengo un orgasmo. Años hacía que
no probaba mi querida pizza uruguaya. Ni qué decir del fainá. Al churri le
gustó mucho.
Después dormimos una larga siesta y el resto del día poco
más hicimos. Al día siguiente empezarían de verdad nuestras vacaciones, que ya
iré contando. Que valga este primer capítulo para haceros saber mis primeras
impresiones. Según lo cuento, lo revivo.
Un viaje muy esperado y con muchas emociones. Ese reencuentro con tu madre y tu familia te habrá hecho olvidar al instante las 12 horas de vuelo.
ResponderEliminarBesotes y feliz 2013
Pues la verdad es que sí. Aunque cuando me eché la siesta caí como si no hubiera un mañana. Jajaja. Besotes!!!
EliminarViaje por capítulos, genial!!
ResponderEliminarLa T4 es lo peor. Si no fuera porque vas de vacaciones y porque en avión se tarda poquito, más de uno ya habría intentado prenderle fuego!
Si en la primera etapa, se te escapan lagrimillas y orgasmas con la pizza, esto promete, jaja
Un besito
Sí, espero que no se me vaya a demasiados capítulos, que no quiero aburrir tampoco... Jajaja.
EliminarFue todo muy emocionante. Ya os iré contando. Besotes!!!
¡Cómo molan las crónicas!
ResponderEliminarLo de la coca en la maleta es un mito, a mí tampoco me pasan esas cosas.
Bueno, un mito no sé... Vi en la tele algún caso de gente a la que le habían pasado cosas así. A mí, por suerte, tampoco me ha pasado nunca.
EliminarUn besote!!!
No me extraña que a tu churri le molase la pizza, viéndote casi tener un orgasmo :)
ResponderEliminarQué buena pinta tienen estas crónicas, deseando estoy leer el siguiente capítulo.
Muas!
Hay que ver cómo se echan de menos las cosas más simples... Un besote!!!!
EliminarQue ganas tenia yo de leer tuaventura Urugaya!!
ResponderEliminary mira que es bonito Montevideo
estare atenta..
besos
Montevideo es un preciosidad, sí. No hay nada mejor en el mundo. Jajaja.
EliminarBesotes!!!
Una introducción que crea curiosidad para conocer el resto de la "aventura".
ResponderEliminarEste año roce patear Montevideo, pero muy al final no pudo ser.
Ay, pues qué pena. Seguro que te hubiese gustado. Un besote!!!
EliminarEncantada de conocerte. He estado un ratito paseando por tu blog, y me ha parecido la mar de interesante, asi que, me voy a quedar por aquí.
ResponderEliminarEspero la siguiente parte de tus vacas.
Un abrazo!!
Pues bienvenida, Abril!!! Ahora me paso a conocerte. Un besote!!!
EliminarNueva sección y además sobre Uruguay, me encanta! Tengo que volver.. como sea! Besitos y que hambre me ha entrado con eso de la fainá (que por cierto no probé ... cachis! ahora sí que tengo que volver!!!)
ResponderEliminar¿No probaste el fainá? Pues tienes que volver aunque sólo sea por eso... Jajaja. Un besote!!!
EliminarAl final estuvisteis en asientos separados durante todo el viaje?? menudo rollo!!! Se nota que la llegada fue estupenda, con las ganas que tenias de volver!!! Ni la lluvia ni el cambio del paisaje te molestaron... todo lo debias ver de color de rosa!!! Espero al siguiente capitulo!!!
ResponderEliminarPues sí, un rollo de viaje y un rollo de lluvia pero valió la pena muchísimo. Pisar el paisito después de tanto tiempo compensaba con creces esos pequeños inconvenientes. Un besote!!!
EliminarQué put*** lo de la lluvia, con lo que se agradecería un poquito de sol. Biquiños!
ResponderEliminarLa verdad es que tuvimos muy poquitos días de lluvia y, además, salteaditos. En líneas generales hubo un sol estupendo. Un besote!!!
EliminarEres buenísima escribiendo, se que siempre te digo lo mismo pero es que es verdad!!!! me he reído un montón sobretodo con lo de revisar por si había cocaína y lo del business!!! jajajaj
ResponderEliminarAlpaca se despide con:
Lo único que necesitamos para convertirnos en buenos filósofos es la capacidad de asombro
Autor: Jostein Gaarder
Mooogggaaaksrfff
Muchas gracias por el piropazo, guapetona!!! Mi cuñado se había encargado de meternos el miedo en el cuerpo pidiéndonos que cerrásemos bien las maletas, que lo mismo nos metían cocaína... Besotes!!!
EliminarHubo algún otro temporal pero en líneas generales sí que lució el sol. Una maravilla. Besotes!!!
ResponderEliminarVoy a ir poniéndome al día, que estoy muy desconectada. Iré comentando poco a poco, vale... no me lo tengas en cuenta..
ResponderEliminarBesos
Jajajaja. Vale, ¿borro el comentario, entonces? XD. Besotes!!!
Eliminar¡Ay qué lindo viaje Álter!, la verdad, no he podido evitar emocionarme con cada parrafito de tu viaje. Me imagino todo lo que estás viviendo, reencontrarte con tu mamita, ver tu ciudad, tu hermoso Río de la Plata... ufffff, qué lindo de verdad.
ResponderEliminarTambién imagino lo que viviré cuando vaya a ver a mi hija otra vez, no veo la hora y lo peor, me da por llorar, si que me están llegando los años.
Disfruta mucho de todo, y perdona que no pueda venir seguido, de todas formas ésta magnífica, no dejará de reportarse y se pondrá al día como siempre.
Besote amiga y cariños a tu familia.
Bueno, pues ya iré contando como fue el resto del viaje... Gracias por pasarte y un besote!!!
Eliminaryo creía que te ibas sola, ya con Forlán me enteré de que no, pero aprovecho aquí para decirte que me alegro de que pudierais ir los dos.
ResponderEliminarNo tengo mucha experiencia en aeropuertos, y flipo, un viaje que vale un pastón ¿y ni siquiera los asientos contiguos? Cada vez que oigo anécdotas de este tipo alucino.
Pues nada, iremos leyendo tus memorias uruguayas, que prometen.
Besazos guapa
El tema con los asientos es que hay que reservarlos antes y no habíamos podido por falta de tiempo y/o incompatibilidad de horarios. Cosas que pasan... Un besote, guapetona!!!
EliminarMe conecté con tu despegue y llegada a Uruguay jejejeje... Y me quedo esperando la segunda y tercera..., partes de éste viaje alucinante...
ResponderEliminarUn abrazo y bienvenida guapa!
Muchas gracias!!!! La verdad es que fue un viaje muy especial para mí. Un besote!!!
EliminarAlter!! te he leido desde tu vuelta pero desde el móvil, que yo también he estado por ahí de pingo, así que creo que no te he comentado nada. Qué alegría tenerte de vuelta!! se te echaba de menos!!. Me he reido mucho con este primer parte del viaje (lo de que luego comentan... jajajaja). Espero impaciente las siguientes entregas.
ResponderEliminarBesos!!!
Pues hay de todo para contar así que espero no ponerme espesa... Un besazo y me alegro de que tú también hayas tenido oportunidad de "pingonear"
EliminarNena, tu alárgate todo lo que quieras, que al revés, estamos deseando saber!!!
ResponderEliminarSi a mi se me hacen largas las 4:30 horas a Cairo, no quiero saber lo que son 12 metida en un avión...
Besos!
No quieras saberlo. Es el infierno en la tierra... (o en el aire, según se mire). Pero la verdad es que vale la pena. Lo haría a menudo si el tiempo y el dinero me lo permitiesen. Jajaja. Un besazo!!!
EliminarEspero la segunda parte de tus peripecias
ResponderEliminarPues este jueves sin falta. Un besazo, guapa!!!
Eliminar:) Me encanta como cuentas las cosas que te pasan, entretienes, no aburres para nada. Espero el próximo capítulo...
ResponderEliminarUn afroabrazo.
Pues me alegro que te guste, guapa!!! Un besazo.
EliminarApenas he podido leer de tu aventura uruguaya, pero me ha encantado, ahora si me he sentido transportada a Montevideo, se nota el cariño que le tienes. Me quedo a la espera del siguiente capitulo, y no te preocupes por los capítulos que te salgan, si alcanza para un libro, pues seguro que nos leemos el libro, xD.
ResponderEliminarSi alcanza para un libro lo publico. Jajaja. Besotes, guapa!!!
EliminarEl viaje y la llegada no han tenido desperdicio (ya me esperaba yo que pasase algo en el aeropuerto o con el avión). Espero con impaciencia el siguiente capítulo.
ResponderEliminarSí, a mí siempre me pasan cosas raras... Un besote!!!
Eliminaraaaayy Que Bonito relato, me ha gustado tanto que me he quedado sin palabras para comentar nada más ;)
ResponderEliminarEstoy ansiosa por leer el resto
Un Besico Guapa.
Pues voy a dar bastante la brasa, así que espero que el ansia te dure. Jajaja. Besotes!!!
EliminarNo cansa, en serio XDDD, alarga esta sección todo lo que quieras, las entradas sobre viajes molan :-)
ResponderEliminarUn besote.
Bienvenido!!! Ya se te estaba echando en falta. Pues mañana toca más. Besotes!!!!
EliminarQué bien escribes jodía! jejeje parece que estoy viendo el avión, la lluvia y la pizza rectangular! Como estoy poniendome al dia con todo aun no se si has seguido contando, si no es así..sigue!! no puedo esperar que soy muy maruja! :D
ResponderEliminarJajaja. Llegas a tiempo. Hoy se publica la segunda parte (con imágenes y todo...). Besotes!!!
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