Marrameowww!!!
¿Cómo han empezado el año mis queridos humanos? Nosotros pasamos mejor Nochebuena que
Nochevieja, todo hay que decirlo. El motivo, los petardos. En nuestro barrio
tienen una insana costumbre de darse a la pirotecnia como si no hubiese un
mañana, con lo que nuestros refinados oídos sufren un montón. Ésta era la
tercera Nochevieja que pasaba yo en este piso y tengo que reconocer que me lo
tomé con un poco más de filosofía que en años anteriores pero para Munchkin era
su primera experiencia en ese sentido y, cuando empezó el petardeo incesante,
corrió a esconderse debajo de la cama, de donde ya no salió en un largo rato,
aunque hay que reconocer que parte de ese tiempo no era que tuviera miedo sino
que se había quedado frito. De verdad, ¿qué gracia le veis a ese ruido
insoportable?
Pero bueno, como decía, en Nochebuena estuvimos mejor.
Fuimos a Albacete y para mí eso ya no es nada nuevo pero era el primer viaje de
Munchkin y creo que pensó que estaba en un parque de atracciones o similar
porque se pasó toda la estadía corriendo por el pasillo, saltando a la mesa de
la comida, tirando los adornitos de las estanterías y arañando los sofás nuevos
de la suegra de la bruja. De hecho, el consorte, tuvo que ir a comprar unas
fundas porque temían por la integridad del mobiliario. Todo esto con la bruja
rezongándole en la oreja, quien no cesaba de repetirle que ya se lo había dicho
ella, que Munchkin era demasiado canijo para pretender que se portara bien, a
lo que él respondía que sí, que tenía razón, que había sido un insensato y
demás lindezas pensadas con el único propósito de conseguir que la bruja se
callara de una buena vez.
Yo me porté bastante bien para que me dieran los mejores
trozos de jamón, por ser el más buenecito (aunque confieso que algún zarpazo
también le tiré al sofá cuando no miraba nadie). No sé si valió mucho la pena
porque, a pesar de haber sido el más bueno, comprobé más tarde que Munchkin
también recibía golosinas a pesar de estar siendo un ejemplo de mal
comportamiento, lo cual me hizo plantearme si no valdrá la pena ser un poco más
salvaje. Total, te diviertes más y recibes los mismos premios. Ser bueno no
compensa.
Eso sí, mi revancha llegó una vez vueltos del viaje, en
forma de veterinario. Llevaron a Munchkin a revisión para ver cuándo lo
esterilizan (jeje, no sabe la que se le viene encima) y resulta que el
profesional de la salud felina ha concluido que está gordito y ahora le tienen
que dar menos ración de pienso. Me troncho yo solo. Ahora anda con carita
lastimera todo el día porque dice que la nueva dosis se le queda en un diente;
dientes que, por cierto, está cambiando y dice que con tan poca comida no tiene
oportunidad de probar sus nuevas piezas.
La venganza se sirve fría.
Prrrrrr.
jajajajaja ya extrañaba leer estos posts de las aventuras felinas. Que se me hace que yo también voy a aplicar eso de portarse mal de vez en cuando porque tienen toda la razon, ser del todo bueno tampoco no deja muchas recompensas que digamos
ResponderEliminarNo, yo cada día lo veo más claro...
EliminarPrrrrrr.
Chico, yo pienso lo mismo de los petardos, no les veo la gracia. Ya no me escondo porque soy mayorcito, pero no me gustan nada. A mí mi ama no me da jamón, la muy tacaña.... aunque me dio un langostino en nochebuena.Y a veces si se descuida, le robo la grasita del jamón que deja en el borde del plato. total, que creo que si me descuido me van a poner a dieta a mí también, tendré que andar con ojo...
ResponderEliminarUn cabezazo, colega, prrrrrrr
RON.
A mí los langostinos no me llaman demasiado, la verdad. A Luhay le encantaban y Munchkin va apuntando maneras de que va a ser otro fan del marisco.
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Mi gato no come más que pan de molde. Me sale muy barato. Un beso.
ResponderEliminarNo soy yo muy amante de las harinas. Prefiero la verdurita.
EliminarPrrrrrr.
Jajaja vaya guerra os habéis montado para coger le mejor bocado. Seguro que os daban la misma cantidad, pero lo tuvo era de más calidad ;)
ResponderEliminarNo sé yo. Me da a mí que no saben premiar el buen comportamiento.
EliminarPrrrrrrrrrrrr.
Pobre Munchkin!!!! (menudas navidades se debe haber pegado para que lo pongan a dieta, jajajaja!)
ResponderEliminarPues nada, a disfrutar de la venganza. Pero recuerda que el que ríe el último... ;)
Miau!
No fue tanto cosa de las navidades sino de que le estaban dando demasiado pienso (mal aconsejados, todo hay que decirlo).
EliminarMe da a mí que el que va reír último soy yo. Recuerda que él aún conserva sus cositas.
Prrrrrrrrrrr.
Pues veo que habeis pasado unas Navidades moviditas, entre viajes y petardos. Yo de la esterilización de momento me he librado, pero no creo que me dure mucho, pues cada vez que me llevan al veterinario, por otro problemilla que tengo con un "kinder" se lo recuerdan a quien me lleve.
ResponderEliminarLametones!
Ánimo que luego pasa rápido. Cuando me lo hicieron a mí, nada más llegar a casa salí dando saltos del transportín.
EliminarPrrrrrrrrrr.
Pobre pequeñajo, que está pasando hambre!!! Y tu Forlan te ries como si mas....
ResponderEliminarClaro que me río. Ha sido cosa del karma.
EliminarPrrrrrrrrrrr.
Ya te extrañaba gato. Cómete algo a mi salú por el gusto de leerte de nuevo.
ResponderEliminarDale un cariño al bichejo ese.
Chao
¿Un cariño? No sé. Bueno, ya que me lo pides tú, se lo daré.
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Amigo!! cuanto tiempo... nosotros las fiestas las hemos pasado en el pueblo asi que nada de petardos, he disfrutado de una paz y una tranquilidad... mucho frio eso sí, pero me han dado una supermanta nueva que me arropa a mi y a tres más, eso y que me vigilaban hasta en el baño, hay que ver lo que me han desgastado el nombre... Pero bueno son buena gente, fijate que les pidieron a los reyes magos que me trajeran mis chuches favoritas y todo. Grrr Lito
ResponderEliminarA nosotros Papá Noel nos trajo dos ratones y una pelotita. Uno de los ratones ya no tiene morro.
EliminarPrrrrrrrrr.
jajaja vaya parece que los petardos son otros y no los que revientan por allá :P
ResponderEliminarhace tiempo que aqui hasta prohibidos están pero no creas, el mercado negro y sus coyotes se las arreglan para vender a algun rebelde sin causa y con ganas de petardear
me hace gracia lo que disfrutan aunque pobre el que le van a echar bisturi pronto y encima con dieta
:O
Pues deberían prohibirlos aquí también porque lo pasamos fatal.
EliminarDe pobre nada. A ver si tras la operación se tranquiliza, que me está volviendo loco.
Prrrrrrr.
Juas! Vendetta contra otra minino!! Y un minino aliado!! Me desconciertas... jis!
ResponderEliminarRascaditas (para los dos)!
^•^
Nosotros somos así. Es una relación de amor-odio.
EliminarPrrrrrrrrrrr.
Jajaja fuisteis ambos a casa de tu güela??? Qué risa, por Dior!!! Ferny cenó langostinos, jamón ibérico y bebió vino francés cosecha de 2003.
ResponderEliminarBesis
35+2
Yo la única vez que probé el vino fue cuando el consorte me tiró encima una botella, como ya conté una vez.
EliminarPrrrrrrrrr.
Jajajaja la verdad, te lo tienes que pasar pipa y encima ahora con permiso para comer más que él y dar envidia.
ResponderEliminarCómo vives...
Besos
En cuanto termino de comer voy a relamerme delante de su cara. Que aprenda.
EliminarPrrrrrrrrrr.
!!Que bueno tenerte de vuelta gatito!!!, había una tranquilidad por la blogosfera que ya estaba aburrida. Hacía falta un gato malacabeza para poner esto más animado, aunque quizás para este nuevo año te has hecho el propósito de ser buenito ahora que estás de hermano mayor.
ResponderEliminarRascaditas.
Yo soy el mismo de siempre. Lo que pasa es que éste me gana en cuanto a trastadas.
EliminarPrrrrrrrrrr.
¿Tu colega está gordo porque sí o demasiado gordo para que lo esterilicen? Es que no me ha quedado muy claro eso.
ResponderEliminarGuauuu.
No. Está gordo porque sí. No es óbice para esterilizarlo pero entre la dieta y la inminente operación yo me troncho.
EliminarPrrrrrrrrr.
Jajaja que penita Munchkin. Habreis dejado contenta a la suegra y a sus nuevos muebles jaja como para fiarse de vosotros. un besito Forlan y no te rias tanto del peque que las venganzas siempre se dan la vuelta, ya veras ya.
ResponderEliminarOye, que yo ya pagué mi parte...
EliminarLa suegra dice que ahora nos echa de menos. No hay quién la entienda.
Prrrrrrrrrr.
Mira por dónde esta vez, ten tengo que dar la razón en algo.... los petardos son insufribles, imagino al pobre peque desorientado, a ti no, que ya eres muy mayor y te conoces todos los ruidos.
ResponderEliminarYo no lo paso nada bien tampoco, que conste. Pero este año por lo menos me acurruqué en un rinconcito del salón en lugar de dar vueltas por la casa como un desquiciado.
EliminarPrrrrrrrrrrrrr.
Nunca es tarde para aprender que ser bueno no compensa, aunque el karma de vez en cuando juegue a nuestro favor... pobre Munchkin!
ResponderEliminarDe pobre nada, que se porta fatal y aun así le dan de todo. Alguna satisfacción tenia que tener yo.
EliminarPrrrrrrr.