Vemos a un chico en una fiesta. Una fiesta de estas que se
supone que son elegantes, porque todos los hombres van de traje mientras las
mujeres lucen sus mejores vestidos de noche. Se ven copas de champán por
doquier y un cisne esculpido en hielo. Aquí es donde yo diría que tan elegante
no será la fiesta con semejante horterada presidiendo el salón pero la nota
discordante realmente no la da el ave congelada sino que el chico del que
hablaba al principio está comiendo triangulitos de maíz directamente de la
bolsa haciendo sonidos crujientes con la mandíbula y llenándose los dedos de
polvillo rojo. Glamour nivel experto.
Comienza a sonar “I need a hero” de Bonnie Tyler y, mientras
el chico se llena la boca con un triángulo de esos (yo soy de las que los van
mordisqueando para evitar la cara de hámster que se le queda a él, pues los
vértices se le clavan en la parte interior de los carrillos) y, sin motivo
aparente, se tira a la piscina vestido como está (con traje y zapatillas
deportivas, a lo Emilio Aragón en VIP Noche). No se tira de cabeza sino
haciendo algo parecido a la grulla de Karate Kid pero con los brazos en
posición hercúlea. Ya sé que no me habéis entendido pero esto es
indescriptible.
A continuación lo vemos sujetando con cada mano la mano de
otros dos tíos mientras una chica le da triángulos de maíz en la boquita. El
plano se abre y vemos que está echando un pulso simultáneo con sendos forzudos.
La secuencia cambia y lo vemos comiendo otro triangulito
(ahora sí parece capaz de alimentarse por sí mismo). Hecho esto, se retira de
los hombros una capa azul noche y observamos que luce unos pañales de tela. No,
no es un anuncio de elementos contra la incontinencia. Por lo visto se dispone a
enfrentarse a un luchador de sumo que le dobla el tamaño a lo alto, a lo ancho
y en circunferencia.
No sabemos el resultado de esto porque el anuncio termina
con una imagen de la bolsa de triangulitos y el lema “Atrévete”. Tal vez hayan
tenido que llevarse al actor al hospital y ya no había tiempo de cambiar el
anuncio, por lo que optaron por cortar las escenas que pudieran herir la
sensibilidad del espectador y dejarlo como estaba.
Así que voy a tener que plantearme, la próxima vez que me
siente delante de la tele a contemplar cómo engordan mis caderas, si no sería
conveniente salir a retar a la vecina a un duelo de capoeira o similar. Lo de
comer por comer ya no mola nada y ahora el objetivo de zampar aperitivos es
armarse de valor para hacer cosas arriesgadas que no harías en circunstancias
normales.
Tal vez los controles anti-dopping de los deportistas de
élite deberían incluir un análisis para descartar si se han ingerido triángulos
de maíz en las últimas veinticuatro horas y, en caso afirmativo,
descalificarlos ipso facto.
yo creo que el luchador de sumo no entró en la provocación. no les veo yo tan abusones. debió de decirle: anda, chaval, lárgate y métete en la cama hasta que se te pase el 'viaje'.
ResponderEliminarvoy a escuchar esa canción que dices de bonnie tyler. gran cantante escocesa de voz ronca...
besos!!
Pues el luchador de sumo corre hacia él sediento de sangre. Tampoco he visto nunca a un luchador de sumo corriendo, ahora que lo pienso...
EliminarBesotes!!!
Y toda esa gilipollez por comer triangulitos? Yo también los mordisqueo aunque menos mal que no los como a menudo, vaya a ser que me comporte igual.
ResponderEliminarBesos
Yo tampoco los como mucho. Soy más de patatas fritas de las de toda la vida.
EliminarBesotes!!!
Hola! Que empacho de los triángulos esos, en vez de dar ganas de comerlos, te llena muchísimo, al menos a mi, jajaja. Por cierto, ya que estaban dejando que el actor hiciera tantas tonterías podrían haber seguido a ver como terminaba la lucha, no nos entienden, jejeje.
ResponderEliminarBesos!
A mí no son los aperitivos que más me entusiasman. Y eso que soy más de salado que de dulce. Besotes!!!
EliminarSi te animas al duelo con la vecina que avise con tiempo Forlán, que yo no me lo pierdo.
ResponderEliminarBesos.
La vecina está bastante mayor. No creo que cuele. Jajaja. Besotes!!!
EliminarUy con lo que como yo necesito un ejército o más para atreverme jajajaja
ResponderEliminarJajajaja. Yo es que soy cobarde, sin más. Besotes!!!
Eliminar¡¡¡¡Jajajaja, qué surrealismo por dios!!!!! Si retas a la vecina a capoeira te ruego que lo grabes y nos deleites.
ResponderEliminarBesos!!!!!
Ya lo andáis pidiendo dos pero, como le decía a Chema, está un poco mayor la señora.
EliminarBesotes!!!
Bueno, supongo que la gente a la que está destinado ese anuncio lo verá todo de color de rosa, incluso el cisne de hielo les parecerá de lo más apropiado...
ResponderEliminarBesos.
Ay, no me recuerdes el cisne de hielo...
EliminarBesotes!!!
Empiezo a pensar que llevan droga. :) Un beso.
ResponderEliminarNo llevan nada bueno. Eso seguro. Jajajaja. Besotes!!
EliminarEs algo altamente dificil de relacionar, parece que los publicistas están más interesantes en que el espectador descifre un enigma. El enigma de que quieren decir a convencer de algo.
ResponderEliminarUn abrazo
Jajaja. Es que son artissssstas.
EliminarBesotes!!!
Los triangulitos son tipo nachos? Para mi son irresistibles pero con guacamole. Por si solos no me dicen nada, no podrían incitarme a cometer proezas...
ResponderEliminar^^
No son tipo nachos, no. Son estos que saben a barbacoa o vete a saber a qué sustancia química.
EliminarBesotes!!!
Jajaja, me ha encantado el detalle del cisne de hielo y lo de glamour nivel experto.
ResponderEliminarNo sé, cada día hacen más raros los anuncios. Ayer vi uno y me acordé mucho de ti, es de unos caramelos de colores. Al chico le salen en la cara como si fuera acné y ella, su amiga, le arranca uno y se lo come. Es lo más asqueroso que he visto jamás. Si no tienes material, búscalo.
Lo tengo visto. De momento lo tengo aparcado porque ya les di caña una vez y no me quiero cebar pero no me lo están poniendo fácil. Jajajaja. Besotes!!!
EliminarJajajaja, les faltaba vestirlo de superman, qué fuerte!
ResponderEliminarBesotes!
Lo mismo hacen algún otro con ese recurso. No puede faltar. Jajajaja.
EliminarBesotes!!!
oye, que te los den en la boca no está tan mal! hay cosos de eso que no como porque odio que se me pongan naranjas los dedos! ><
ResponderEliminarJajajaja. Tú en el imperio romano hubieses sido feliz. Siempre que te hubiese tocado ser el emperador, claro...
EliminarBesotes!!!