Una de las profesiones que más me costará entender en esta
vida es la de odontólogo. No me refiero a que no entienda a qué se dedican ni
qué carrera han estudiado, claro está. Lo que no entiendo es cómo alguien en su
sano juicio puede pensar en algún momento de su vida que lo que más le llenaría
de orgullo y satisfacción es hurgar en la boca de la gente. Me imagino a la
abuelita preguntando a su nieto “Nene, ¿qué vas a querer ser cuando seas
mayor?” y el niño, con los ojitos encendidos de ilusión, respondiendo “Quiero
curar la halitosis, abueli”.
Si hay algún dentista leyendo esto, le ruego me disculpe. Sé
que los dentistas son necesarios para mantener nuestra salud bucal y nuestro
bienestar general pero no consigo entender cómo no se mueren de asco explorando
las cavidades de perfectos desconocidos (aquí me diréis que peor lo tienen los
proctólogos pero yo de esas cosas ni hablo).
Y, claro está, no faltará quien apunte que un dentista cobra
mucho y que poderoso caballero es Don Dinero y todo lo demás pero qué queréis
que os diga; un electricista también cobra mucho y ni tiene que estar viendo
guarradas ni ha tenido que estudiar años y años de carrera. Los electricistas
sí que saben. Los fontaneros, ya no tanto, que sí es cierto que cobran mucho
pero hay cierta situaciones en las que no me gustaría para nada verme envuelta.
Pues eso, que no me creo que alguien estudie Odontología por
puro amor al vil metal, ya que hay actividades igual de lucrativas y de más
fácil acceso. No. Esto es vocación pura. Incomprensible, sí, pero vocación al
fin y al cabo. O tal vez lo que suceda es que, tras cada dentista titulado, se
esconda un psicópata frustrado, a quien lo que realmente le gusta no es librar
a sus pacientes de las penurias sino arrancar muelas, ver brotar la sangre, dar
“pinchacitos” con agujas gigantescas y, lo que es peor, obligarles a debatir
sobre temas de actualidad cuando tienen la boca llena de aparatos de tortura y
están a punto de morir ahogados en su propia saliva.
Recuerdo que no hace mucho mantenía una conversación con mis
amigos. Una conversación profunda y filosófica, que es lo que nos caracteriza,
porque nosotros somos gente seria y auténticos librepensadores contemporáneos.
En esta ocasión, hablábamos de profesiones curiosas y salió el tema de gente
que cata helados. Una amiga decía que vaya empacho de helado, que qué horror de
trabajo y mirad, llamadme loca si queréis pero a mí me dan a elegir entre estar
quitándole el sarro a gente que no conozco de nada o probar la nueva variedad
de frutos del bosque con banana del Amazonas y no creo yo que tuviera que
pensármelo mucho. Seguramente no cobraría lo mismo pero estoy plenamente
convencida de que ese trabajo me reportaría muchas más satisfacciones.
Mi báscula quizás no opine igual pero qué sabrá ella, la muy
maldita.
yo tampoco entiendo esa profesión ni la de proctólogo...
ResponderEliminar...
jajajaja
ay alter me has dejadopensando. soy una asquerosa quisquillosa y "tikismikis" que ni a los masajes le entro por no andar tocando gente :( ugh"
Es que masajes, según a quién y según dónde. Jajajaja. Besotes!!!!
EliminarYo también prefiero los helados. El otro día me preguntaba yo también lo de los odontólogos, que gusto le ven. Un beso.
ResponderEliminarPor suerte hay gente con esa vocación pero es que no me lo explico... Besotes!!!
EliminarPues yo le veo otras ventajas, además de la económica. Te organizas el tiempo como quieres, no tienes que hacer guardias, tus pacientes no están graves, no puedes meter la pata hasta el punto de cargártelos, etc.
ResponderEliminarConste que no soy dentista.
Besos.
Bueno, lo de organizarse el tiempo como quieren, según y conforme. Los que trabajan en clínicas de estas que están ahora tan de moda no se organizan nada. Y sí que atienden urgencias. Imagínate estar en tu casa un domingo en pantuflas y tener que salir corriendo a la clínica porque a alguien le duele mucho un diente. Qué estrés. Jajajaja. Besotes!!!
Eliminar¡¡¡¡Dónde va a parar!!!! Catar helados!!!! O catar chocolate!!! o... en fin... cualquier cosa de esas me parecería genial!! Aparte los catadores no suelen empacharse... solo tienen que ir probando... ¿no? Lo malo es que esté demasiado rico... jaja
ResponderEliminarYo tampoco entiendo lo de los dentistas... Nada nada...
Aunque no se usan las mismas herramientas de tortura... siempre me he planteado el punto psicópata que me invade en ese momento de la guardia (que no suele faltar...) en el que le digo al/la paciente de turno lo de: "tengo que hacerle un tacto rectal" (a lo que a veces, según la cara de ignoracia que pongan, añado lo de "que es meterle un dedo por el culete...") En ese instante me doy la vuelta... y mientras me lavo las manos me pongo los guantes y agarro el lubricante, me imagino qué cara estará poniendo la víctima y la cantidad de cosas que se le pasarán por la cabeza. Y me entran unas ganas extrañas de reír que no sé en qué punto controlo... jaja (FIN)
Eso sí... lo hago, pero no me dedico plenamente a ello. Y solo disfruto de esos segundos de meditación... Gustarme no me gusta... jajaja
(Otro momento genial relacionado con eso... es cuando tienes que describir los hallazgos y pienso... "tanta literatura por meter un dedo en el culo...") En fin... voy a dejarlo... jajaja que prefiero lo de los helados!!
Ichhhh, yo es que no podría. Creo que en animales me daría menos asco, ya ves tú qué cosas. Debo de tener un punto sociópata.
EliminarPero, en fin, todas las profesiones tienen su parte desagradable. Algunas más que otras... Besotes!!!!
Jajajaj, desde luego lo que no pienses y razones tú ya no lo piensa nadie. Yo catadora de helados no, pero de empanadas, potajes o tortillas ahora mismo.
ResponderEliminarBesos.
Ay, empanadas... Qué ricas!!! Jajajaja.
EliminarBesotes!!!!
Jajajajaja ay qué bueno!! Casi me mato de la risa con "Quiero curar la halitosis abueli" jajajajaja la verdad es que tienes toda la razón, aunque yo no soy excesivamente enamorada de los helados y creo que no elegiría ninguna de las 2 cosas. Un besazo
ResponderEliminar¿Aun cuando sólo tuvieras esas dos opciones? Da para pensarlo, ¿eh? Jajajaja. Besotes!!!
Eliminarjijijiji...esa mismo pensaba yo el otro día que fuí a hacerme una limpieza, ¿que le encontraría mi dentista a aquello?...pero lo cierto es que tiene que haber vocación o vaya ascazo, y hablan contigo cuando no puedes más que babear y se ven salpicados en sarro y.......halaaaaa, da igual! jajaja...
ResponderEliminarHombre los helados mu bien, pero digo yo como aquella que trabajaba en una fabrica de mantecados, al final tiene que cansar... ¿no?
Un abrazo.
Pues sigo prefiriendo cansarme de helados que de ver muelas picadas, qué quieres que te diga. Jajajaja. Besotes!!!!
EliminarPues yo estuve a punto de estudiar Odontología. Y como había hecho el bachillerato de Humanidades, decidí apuntarme en RD ahahahahaha luego no sé porqué cambié de idea, pero estuve a puntito jajajajaja
ResponderEliminarLocuras de juventud xD
Besos
Eres una caja de sorpresas. Nunca me lo hubiera imaginado de ti, jajajaja. Besotes!!!!
EliminarToda la razón, y yo también me pregunto ahora que como llegan a ser dentistas porque está claro que no es el sueño de ningún niño, jejeje. Por cierto, a mi me dan muy mal rollo, no lo puedo evitar y también prefiero catar helados, jajaja.
ResponderEliminarBesos!
A mí mal rollo no me dan, aunque también es cierto que, de momento, no me han tenido que hacer nada del otro jueves. No tengo ni empastes, con eso te digo todo. Pero sigo prefiriendo los helados, incluso como usuaria. Jajajaja. Besotes!!!
EliminarChica, para todos los trabajos hay que valer... Ser dentista a mí no me mola, pero ¿ser podólogo? ¿Cirujano hurga-tripas? ¿enfermera? ¿auxiliar de geriatría? ¿matrona???? Yo qué sé, es que yo soy muy escrupulosa, qué quieres que te diga. Sin embargo, igual a lo de los helados, si fueran de soja, me apuntaba. Y a probadora de colchones y hamacas. A probadora de hoteles en el Caribe. Fíjate qué de curros chulos en lugar de cochinadas.
ResponderEliminarUn beso!!
Cirujana no creo que me diera tanta grima, mira tú. Todo lo demás sí que me daría más cosita. Evidentemente, hay una larga lista de trabajos que uno no se explica que se hagan por amor al arte (al menos, yo) pero si no el post sería interminable. Jajajaja.
EliminarYo es que cuando veo estos programas en Canal Viajar tipo "Hoteles de lujo" y una piba que se recorre el mundo opinando de hoteles cinco estrellas me digo a mí misma "esta sí que sabe". Jajajaja. Besotes!!!!
Totalmente de acuerdo. Hay muchas profesiones así, para raritos. Yo también sería degustado de helados sin duda. ¡Donde va a parar!
ResponderEliminarBesotes!
Aunque también digo que,por suerte, hay raritos. Si no, estaríamos perdidos. Jajajaja. Besotes!!!!
Eliminarjajaja yo también y sin empacho porque hay muchos sabores jajajaj no es siempre el mismo
ResponderEliminarClaro que sí. Cada día es un desafío. Jajajaja. Besotes!!!!
EliminarCompletamente de acuerdo! Y si encuentras un sitio que necesiten dos catadoras de helados, llámame!!!
ResponderEliminarLo de los Odontólogos o Dentistas, yo tampoco lo entiendo mucho, la verdad. Salvo lo de que cobran pasta, el resto, me parece un asco. Yo que soy más escrupulosa que la hostia, no me imagino tocando la boca de nadie, puaj. Aunque una vez oí a uno de ellos decir que se consideraba: fabricante de sonrisas bonitas...no sé, yo me consideraría eso si fuera un humorista ;-)
Besotes
Jajajaja. Imagino que si luego ves a un paciente con unos dientes perfectos te tiene que dar mucho subidón saber que eso ha sido obra tuya pero no creo que me gustase pasar por el proceso. Jajajaja. Besotes!!!
EliminarYo también prefiero ser catadora de helados, aunque aún mejor me gustaría esa opción que mencionan en algunos comentarios, la de probar hotelazos. Eso si que se me daría bien :)
ResponderEliminarLo de los dentistas... bueno, conozco a varios y por lo que ellos cuentan es vocación. Y dinero, claro.
Besos.
Yo también me apunto a lo de los hoteles. Eso no me daría asco. Jajajaja.
EliminarBendita vocación, qué haríamos si no hubiera nadie que la tuviera... Besotes!!!
Es que no hay color... Y eso que no soy devorahelados... Pero yo ni me lo pienso, vamos! :P
ResponderEliminarMuas!
¿A que no? La decisión estaría clara... Un besote!!!
EliminarJajaja, lo del proctólogo me lo has quitado de la boca. A ver, alma de cántaro, y qué me dices de los que trabajan en funerarias y de los forenses abriendo muertos todo el día, pues no hay profesiones asquerosas, pero seguro que hay gente que tiene vocación, jajaja. Eres la pera. MI padre quería que yo fuera dentista por el parné, yo que veo una mancha de sangre y me vuelvo majara.
ResponderEliminarEres la pera :P
Besotes
Como le decía a Naar, es cierto que hay muchas profesiones incomprensibles pero, si no, el post sería inacabable. Jajajaja. Besotes!!!!
EliminarEstaba pensando justamente en lo de la ultima oracion.. la balanza no opinaria igual sobre lo de catar helados! jaja
ResponderEliminarTampoco entiendo mucho a los dentistas, a mi me pareceria horroroso.. pero hay para todos los gustos..
beso, buen finde
Y por suerte hay para todos los gustos. A ver qué íbamos a hacer con nuestros dientes, si no... Jajaja. Besotes!!!
EliminarSupongo que para ellos una boca es como un motor de coche para un mecánico. Arreglan lo estropeado y no cobran bien. Y luego la ventaja de hablar sin que el otro te pueda llevar la contraria. No está tan mal aunque no lo cambiaría por catar helados.
ResponderEliminarEso sí que es cierto. Pueden opinar lo que quieran, que uno no tiene oportunidad de réplica. Pero yo lo cambiaría por lo de los helados tampoco. Besotes!!!
EliminarSoy de las tuyas. Odio ir al dentista y siempre que me toca ir, sin ir más lejos un empaste la semana pasada, me preguntó qué pasaría por su cabeza al elegir ser dentista. Si te va el rollo sanitario cualquier otra opción es mejor (bueno, quizá no cualquiera).
ResponderEliminarCatador de helados por el contrario es un trabajado, a mi edad acabo de descubrir mi vocación :)
Un beso
Yo no es que odie ir al dentista (aunque debo decir que he tenido suerte y nunca me han tenido que hacer cosas muy terribles). No es que me entusiasme, tampoco, pero bueno.
EliminarPero lo de los helados es una maravilla, oye. Jajajaja. Besotes!!!!
Pero vamos, de calle que prefiero comer helados... y ya si me pagan ni te cuento, He tenído más o menos la misma conversación pero con probador de colchones, que también es buena. Si ciertos oficios existen, hay gente muy grande en este mundo que ha sabido buscar su hueco mucho mejor que yo. Me quito el sombrero ante ellos.
ResponderEliminar¿Probador de colchones? Eso también mola mucho. Podría hasta pluriemplearme. Jajajaja. Besotes!!!
EliminarLa verdad es que hay que tener mucha vocación y tienes toda la razón en que son dignos de admiración. Un besote!!!
ResponderEliminarUf me has hecho rememorar los malos tragos en el dentista #hate
ResponderEliminarLa verdad q es admirable sí, tienes que ver de todo en una boca.. puag.
BEsos
Tiene que ser muy asquerosito. No sé cómo tienen estómago para eso.
EliminarBesotes!!!
Tengo dentistas en la familia. Pero sí, algunas de las cosas que mencionas las llegué a decir yo también cuando me preguntaban por qué no estudié eso. Me hizo mucha gracia lo descriptivo del post. Recibe un saludo, que estés muy bien.
ResponderEliminarEs que hay que tener un estómago muy especial para dedicarse a eso. Yo no podría. De verdad que preferiría ser cirujana y andar abriendo a la gente en canal que estar hurgando en la boca de la gente... Uffff.
EliminarBesotes!!
Hola: nunca había reflexionado sobre la profesión de dentista pero leyéndote estoy totalmente de acuerdo contigo. De todas formas tengo amigos dentistas y su pasión es dejar las dentaduras equilibradas, los dientes simétricos y limpísimos... Hasta disfrutan cuando tienen que recomponer todas las piezas dentales... Con respecto a catador de helados es una forma fabulosa de disfrutar de variedad de sabores aunque seguro que al final terminaríamos odiándolos. Seguimos en contacto
ResponderEliminarSí, si me imagino que alguna satisfacción les tiene que dar su trabajo pero creo que el precio que pagan es muy alto. Jajajaja.
EliminarDe todas formas, si me canso de los helados puedo pasarme a catar piruletas. Jajajaja. Besotes!!!
No puedo opinar, les tengo verdadera fobia ;)
ResponderEliminarJajajaja. Yo no tanto, pobres... Pero sí que me cuesta entender su vocación. Besotes!!!!
EliminarLa teoría del psicópata me parece la mas acertada! Besos nena!
ResponderEliminarJajajajaja. Es que no hay más que ver esos aparatejos... Besotes!!!!
Eliminarjajjajajajajaa le tendré que prguntar a mi cuñada que es dentista jajajajajaa
ResponderEliminarLo paso fatal, cada vez que me llama para recordarme que tengo que ir a verla empieza a dolerme la boca en un sin parar bufff
Yo también me apunto a ser catador de helados ummmm se me hace la boca agua de pensarlo jejejee
Besines
Es que mola mucho más, dónde va a parar... Pero no se lo digas a tu cuñada, a ver si va a cambiar de profesión de repente. Jajajaja. Besotes!!!!
EliminarYo tampoco, y espero seguir así. Jajajaja.
ResponderEliminarDesde luego que es una profesión noble. Lo único que quiero es entenderla... :)
Besotes!!!!
y dónde se aplica a catadora? es un trabajo de verdad o un plan maligno de los dentistas para causarnos más caries? ¬¬
ResponderEliminarEs verdad. No lo había pensado. Lo mismo es una trampa. ¡Huyamos!
EliminarBesotes.