Cuando yo era soltera (bueno, sigo siéndolo pero ya me
entendéis) compraba leche de una marca asturiana porque Asturias mola mil (de
nada, Eva). Eso sí, la compraba semidesnatada, porque la entera estaba pensada
para que crezcamos sanotes y fuertotes cual auténticos chicarrones del norte y
tenía unos enormes grumos de nata que de repente saltaban de la botella al vaso
o taza provocando terribles salpicaduras. Pero, como digo, comprando
semidesnatada tenía una leche igual que la entera de cualquier otra marca y de
una calidad estupenda. Si me leen me contratan para hacer el próximo anuncio,
oye.
El problema es que un día me fui a vivir con el churri. Ya
se sabe que cuando una se ha acostumbrado a sus manías de chica single, sabe
que va a tener que transigir en numerosos aspectos cuando decide compartir el
camino de la vida con otra persona (qué poético me ha quedado esto). Y el
churri compraba otra marca de leche. No es que la leche que compraba él fuera
mala pero tenía una gran diferencia que para mí era vital con respecto a la
marca que yo solía comprar: No venía en botella, venía en tetrabrik. Y no en el
tetrabrik normalito y simétrico de toda la vida, no. Se trataba de un tetrabrik
con una especie de tejadito a dos aguas en su parte superior que levantaba mis
iras y me hacía blasfemar en arameo. “Pues vaya tontería. Qué más dará”, diréis
vosotros. Pues no, no da lo mismo y paso a explicar por qué, que os veo
perdidillos.
Cuando la leche viene en botella cae cual cascada
ininterrumpida, sin provocar ningún tipo de conflicto (salvo si tiene demasiada
nata, como ya he explicado al principio de este post), es como una catarata
láctea que viaja sin interrupciones hasta el recipiente donde queramos
volcarla. En un tetrabrik con tejadito a dos aguas la leche cae en capítulos.
Tú la vas vertiendo en el vaso, taza, cacerola o donde sea que te dé por
verterla y mientras tanto escuchas “Blup, blup, blup” y sabes (porque lo sabes)
que uno de esos “blup” va a preceder a un chorro traicionero que salpique cuanto
pille a su alrededor y, a su alrededor, suele estar el ser humano que vierte la
leche. Ese ser, en este caso, era la otrora chica single que se había
acostumbrado a su catarata láctea y no estaba dispuesta a transigir en eso. En
otra cosa, sí; pero en eso, ni hablar.
Es por eso que, cada vez que me servía leche con el
tetrabrik a dos aguas me temía lo peor. Y lo peor se cumplía. Y yo protestaba.
Y el churri se hartaba cada vez más de escuchar lo importante que era la forma
del continente lácteo.
Y fue así como, tras un trabajo fino de manipulación
psicológica y, por qué no decirlo, de chantaje emocional, conseguí que en aquél
mi nuevo hogar se empezase a comprar la marca de leche que compraba yo en mis
épocas de soltería. Y todo fue felicidad.
Y qué fácil es hallar la felicidad en las pequeñas cosas. En botella, eso sí!
ResponderEliminarMuaks
En botella siempre. Jajajaja. Besotes!!!
EliminarVamos, un tetrabrick con tejadillo, Hasta ahí podíamos llegar!!!
ResponderEliminarEs una vergüenza. Así va el país. Jajaja. Besotes!!!
EliminarEs que los hombres... Quizás en ese "salir la leche a borbotones" esté oculto algún mensaje subliminal que las féminas rechazáis de forma compulsiva... jajaja
ResponderEliminarBesos.
Jajajaja. Si es que sois muy monotemáticos... Besotes!!!!
EliminarTetrabrik a dos aguas
ResponderEliminarSólo Alter Ego puede inventarse el término. En fin, por eso te sigo, Alter
Jajaja. Es que a veces es complicado explicar las cosas sin poder hacer gestos. Un besazo, guapísima!!!
EliminarJajajajajaja...Pues ahora q lo pienso desde q vivimos juntos mi chico ha dejado de comprar su leche y sólo compramos la mía desnatada... La mía va en tetrabrick de toda la vida...
ResponderEliminar¿Querrá decir esto que irse a vivir en pareja implica que los hombres cambiarán su marca habitual de leche? Habría que hacer una encuesta...
EliminarComo digo por ahí, el tetrabrik normal me disgusta menos. Besotes!!!
Es que no hay comparacion. elegir comprar leche en tetra a dos aguas puede ser motivo justificado de divorcio.
ResponderEliminarSi es que estáis muy perdidos en la vida... Jajaja. Besotes!!!
Eliminar¿Y si ahora te digo que si la leche de brick de tejadillo la echas con el brick del revés (es decir, con el lado del tejadillo del agujerito como para arriba) ya no salpica?
ResponderEliminarBueno.. ahora que lo has conseguido, mejor que no se entere del churri de este truco!
Jajajaja
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Pues no lo sabía. Gracias por ese truco tan Discovery Channel. Jajajaja. Si en algún momento otro tetrabrik con tejadillo osa entrar en mis dominios, ya lo comprobaré empíricamente. Besos y gracias por la visita!!
EliminarCon un tetrabrik rectangular puedo llegar a claudicar... Besotes!!!
ResponderEliminarPero como somos las mujeres, con un poco de psicologia conseguimos lo que queremos, aunque el hombre siga sin entender la diferencia, que seguro que es lo que le ocurre a tu churri... por no oirte blasfemar cada mañana, habrá cedido....
ResponderEliminarAunque si te soy sincera, yo ni me habia planteado la diferencia de la caida del chorrito... lo que aprende una leyendo este blog!!!
Si es que soy una fuente inagotable de sabiduría. No sé que haríais sin mí. Jajaja. Besotes!!!
EliminarTetrabrik con tejadito a dos aguas, me meo! jajaja pero he de decir que estoy contigo, mucho mejor en botella que los tetrabriks son muy traicioneros, a mi también me salpican..ufff Me alegro que al final reinase la felicidad en el apartado lácteo de tu hogar! XD
ResponderEliminarBesos!
Sí, es que aquello estaba haciendo peligrar la armonía del hogar. Jajaja. Besotes!!!
EliminarJajajaja! Tu churri es mu listo Álter, y por la felicidad conyugal...lo que haga falta! :D
ResponderEliminarMuas!
El churri sabe que le conviene tenerme contenta... Jajaja. Besotes!!!
EliminarJajaja... pues claro que si!!! Tienes todita la razón... y además de Asturias, que es ver la botella y me imagino las vaques en ese entorno natural tan verde ideales ellas! Je! ;)
ResponderEliminarSi es que son vacas felices!!! Besotes.
EliminarTe voy a dar toda la razón: el tejaillo a dos aguas....hace aguas por donde quiera que lo mires!! a mí igual, me ponía atacá...por eso dejé de comprar ese envase y ahora también soy del club de botella.
ResponderEliminarSi es que ya no saben como van a cambiar los envases para que desperdiciemos más...serán derrochones!!!... Como los botecitos de especias del Mercadona. El otro día quise darle un toquecillo de canela a mi postre favorito y allí pudo salir una montaña, yo creo que hasta me inhalé una rayita de canela....jajaja. Y todo porque ahora los agujeritos del bote son del tamaño de un garbanzo. ¿Se creen que somos idiotas?.
Besos guapa!!
Hay toda una filosofía subyacente en el formato de los envases... Besotes, hermana de botella!!!
EliminarOhhhhh! un cuento con final feliz! Doy fe de que los tetrabricks son una porquería, y eso que el mío no tiene tejadito, pero da igual, hasta que no has vaciado media botella no te libras de los salpicones. Es curioso que casi todos los días me cabreo y suelto alguna palabrota por este tema y hasta ahora no me había dado cuenta ni había interiorizado este problema ¿porque tengo yo que aguantar los dichosos salpicones? No sabía que con la botella no ocurre, gracias a ti he visto la luz.
ResponderEliminarBesos
De nada. Un placer servir a la comunidad. Verás cómo cambia tu vida a partir de ahora. Besotes!!!
Eliminarpues yo no entiendo eso del tejadillo.... así que pido prueba visual YA!!!, vamos, que en mi casa se compra la que esté de oferta como toda la vida... niña pija...
ResponderEliminarjejejeje, besotes.
Caprichosa y pija soy un rato, eso tengo que admitirlo. Yo nací para rica pero algo debo haber hecho mal. Jajaja.
EliminarCon el tejadito a dos aguas me refiero a que no es el típico tetrabrik sino que la parte de arriba hace forma de tejadito. Besotes!!!
Jajaja, es que las buenas costumbres casi hay que imponerlas :P Asturias mola un montón (suscribo xD) Y la leche es la que llevo tomando desde que tengo uso de memoria. El brik traicionero también tuvo su momento hace un porronazo de años, creo, pero enseguida lo sustituyeron por la botellita que es lo más cómodo del mundo.
ResponderEliminarBesines!
Mira, otro del club de la botella. Al final, somos legión. Jajaja. Besotes!!!
Eliminar¿¿¿¿Y no podían convivir la leche asturiana que mola mil con el brick de tejadillo a dos aguas bajo el mismo techo??? de la casa quiero decir.
ResponderEliminarClaaaaaro luego nos llaman manipuladoras y es por estas cosas :P
Besazo
Es que a él realmente le daba lo mismo una marca que otra y por no oírme blasfemar...
EliminarNo. Si al final tendrá la culpa mi botella de leche de los tópicos del universo. Jajaja. Besotes!!!
Pues ya conozco tu blog, gracias a Inma. Y leyendo esto he decidido que tengo que quedarme. No te preocupes, que molesto poco.
ResponderEliminarMe has recordado a una de las intervenciones más geniales de Tip y Coll. Aquélla en la que te enseñaban a llenar de agua un vaso con una jarra.
Se te ha olvidado decir (porque estoy seguro de que fue así) que tu chico se había quedado convencido de que había sido él quien había tomado la determinación de cambiar a tu leche (con perdón).
Besos.
Pues bienvenido!! Ahora me pasaré a leerte porque la verdad es que ayer con las prisas no tuve tiempo ni de quedarme un poco en tu casa a cotillear.
EliminarAyyy, lo del vaso. Eso es mítico... Me ha faltado la traducción simultánea al francés. Jajaja.
La verdad es que el churri no es de tergiversar la realidad. Prefiere decir que cedió por no aguantarme. Parecerá menos machote pero yo pareceré más desequilibrada...
Besotes!!!