Marrameowww!!!
En un capítulo más de la guía práctica que podríamos
denominar “Cómo hacer la vida imposible a tu humano”, hoy tocamos el tema del
despertar.
De más está decir, queridos lectores felinos, que la hora de
levantarse no la decide el humano en cuestión. La decide el felino.
Cuando queráis que vuestro humano se levante de la cama,
podéis echar mano de todas vuestras artimañas, no importa cuán viles o
retorcidas éstas sean. Todo vale. Desde el ronroneo en la oreja hasta que
piensen que en la calle están perforando con una máquina, hasta el cambio de
pose cada treinta segundos, pasando por las cosquillas con bigotes en la nariz.
Si vuestro humano, como la bruja, es inmune a estas técnicas sutiles, podéis
pasar a técnicas más drásticas como robarles la almohada, tirarles del pelo con
las uñas (sin engancháis cuero cabelludo en el proceso puntúa doble), morderles
las manos o, como hacía Luhay que se andaba con menos miramientos, tirarles un
zarpazo en el dedo gordo del pie, que ahí fastidia mucho.
Una vez alcanzado vuestro objetivo y observéis que el humano
se levanta (refunfuñando, pero se levanta) ya sois libres de hacer lo que os
plazca que, en mi caso, suele ser ir corriendo al salón a tumbarme en el sofá y
dormir ahí toda la mañana. He llegado, en un alarde de crueldad, a quedarme
tumbado en la cama y levantarme cuando suena el despertador. Esto último
fastidia especialmente.
Quiero decir con esto que no es necesario que tengáis la
necesidad de algo para arrancar al humano de brazos de Morfeo. No es porque
tengáis hambre o ganas de jugar o un ansia imperiosa de que os mimoseen. El
máximo placer es despertarlos. Porque sí. Porque podemos, básicamente.
Esto les hará tener claro (si no lo sabían todavía) quién
manda en casa. Que luego se nos rebelan y andan pensando que vamos a hacer lo
que ellos quieran y eso, queridos lectores felinos míos, es, en la mayor parte
de los casos, culpa nuestra y sólo nuestra, que los malacostumbramos
portándonos bien y luego se piensan que todo el monte es orégano y que van a
poder dormir hasta la hora que quieran. Eso es lo que no podemos consentir.
Tenemos que unir nuestras fuerzas para hacerles saber quién tiene el poder y, a
ser posible, que nos estén agradecidos por tener con ellos la conmiseración de
dejarles dormir un ratito, aunque más no sea. Si se acostumbran a tener muy
poco de todo, cualquier concesión que les hagamos la recibirán con alegría,
diciendo que tienen un gatito buenísimo que se ha portado fenomenal y os
premiarán con latitas, achuchones y juguetes nuevos. Si esperan lo peor,
cualquier cosa por encima de esta cota les parecerá estar en la gloria.
Creedme, que de estas cosas sé un rato. Ansioso estoy por que pongáis en
práctica mis sabios consejos y ya me contaréis qué tal os va con el proceso de
adiestramiento. Al principio cuesta pero la recompensa es altamente
gratificante.
Prrrrrr.
Por eso, y sólo por eso, Missi y Fantasma duermen encerrados en el salón tooooooda la noche Juas juas juas.
ResponderEliminar¿Y no maúllan para salir? A mí me hacen eso y ahí sí que no duerme nadie en toda la noche.
EliminarPrrrrr.
Minino los fines de semana durante el invierno siempre nos despierta exigiendo algo, pero este verano esta desconocido se pone a jugar con Ary o simplemente se despierta con nosotros en cama y desayunamos todos a la vez, que es un placer! Besos felino guapetón !
ResponderEliminarYa hablaré seriamente con Minino. Está perdiendo facultades.
EliminarPrrrrr.
jaja. me parece que Ciro leyó esta nota ya.. es un experto en despertarme.. hoy me olía con su naricita y me hacía cosquillas con los bigotes..
ResponderEliminarEso fastidia mucho. Es una técnica infalible.
EliminarPrrrrr.
Querido amigo:
ResponderEliminarsi nada de eso funciona (yo lo uso tooooodo) siempre puedes hacer la técnica de lamer. No sé por qué a mi ama no le gusta que le chupe los ojos con mi áspera lengua. Y si no, morder orejas suele funcionar. Además del consabido pisoteo mañanero, que trata de pasearte por encima del pobre humano hasta que se siente muy aplastado. puedes sentarte en su barriga o directamente en su cara. este método es rápido porque no les suele gustar respirar debajo de tu culo. Espero que te sirvan mis consejos, soy un experto despertador... para luego desayunar y volverme a dormir, por supuesto.
Un cabezazo, colega!!
Ron.
Lo de sentarme encima de su cara sí lo practico. Lo de lamer no tanto. No soy yo muy lametero (entre nos, me da un poco de asquito... A saber si están limpitos estos humanos).
EliminarPrrrrr.
Sólo te ha faltado concluir con algo así como "Los felinos dominaremos el mundo", que te ha quedado una entrada un poco en plan secta :P
ResponderEliminarEs que no hace falta decirlo. Eso está cantado.
EliminarPrrrrr.
Le voy a contar a tu dueña que puede cerrar la puerta y dejarte fuera...
ResponderEliminar¿Que esperabas? Soy mala!
Besitos!
Lo sabe pero prefiere que la despierte por la mañana a que no la deje dormir con mis maullidos desgarradores desde el otro lado de la puerta.
EliminarPrrrr.
Le voy a contar a tu dueña que puede cerrar la puerta y dejarte fuera...
ResponderEliminar¿Que esperabas? Soy mala!
Besitos!
Doblemente mala, por lo que veo...
EliminarPrrrrr.
Juas!
Eliminarjejejeje no seas malo! Es terrible que te despierten así, sin paños calientes! Ya verás como la bruja decida vengarse y te deje sin siesta mañanera... (Esto es verídico, mi amiga Reina tiene dos gatetes y cuando la dan la tabarra in the night les tiene todo el día castigados sin dormir!)
ResponderEliminarBesos
Ayyyy. Eso es tortura felina... Al final la bruja no va a ser tan mala...
EliminarPrrrrr.
Hay que joderse con el ansia felina de molestar... sigo durmiendo.
ResponderEliminarAsí somos nosotros. Hay que querernos así...
EliminarPrrrrr.
jajajaja Forlán!! con lo bien que te cuidan y luego tú torturando el sueño... A ver si te va a poner a dieta como venganza
ResponderEliminarBesos gatunos ;)
Bueno, eso de que me cuidan bien habría que verlo...
EliminarPrrrrrr.
Croquetas de gato :D
ResponderEliminarEsa es la solución, sin piedad, que los gatos se pueden defender, luego clavar la cabeza del finado en la puerta de la habitación como aviso a navegantes.
Besos Alterita.
Vaya cosas dices. Te mereces un bufido.
EliminarPffffff.
Ay Forlancito, que me encantan a mi estas técnicas! Pero mucho cuidado, hay que hacerlas sutilmente, que no piensen que necesitas algo, que ya sabes, al final, te toca visita al veterinario y pastillita nocturna... aainss la voy echando de menosss!!
ResponderEliminarEso sí, ahora como soy taaaaannn buenaaaaa, recibo miles de premios!!
Lamiditos
A mí es que no me dan pastillita nocturna, por lo que puedo molestar a placer.
EliminarTú te mereces todos los premios del mundo, ma chérie...
Prrrrr.
Eres un mal bicho, ya lo digo.
ResponderEliminarComo humana te diré que también tenemos recursos. En esta santa casa la puerta del dormitorio queda cerrada y precintada de día y de noche, basicamente para que el coriano no termine muriendo entre terribles estertores debido a su alergia, al menos el dormitorio es sagrado.
Y ya pueden ponerse los dos a rascar en la puerta, que si se ponen tontos, los encierro en otra habitación y que maullen.
Ahora si te atreves llama a la Protectora de animales.
Besos
Pero estos son unos pusilánimes. No tendrán valor...
EliminarPrrrrrr.
tu no vives con humanos, vives con santos.
ResponderEliminarCómo se nota que no los conoces.
EliminarPrrrrr.
Por eso yo hacia que mi gatita durmiera en el garaje... Pero sabes que? Los gatos sois más listos y consiguió aprender a abrir la puerta y subir a espabilarme.
ResponderEliminarNo hay quien pueda con la astucia felina!!
Muahahaha. Te está bien empleado.
EliminarPrrrrrr.
Bueno... si todo lo anterior falla, siempre te queda la opción suicida que eso pone de los nervios a los humanos por dos razones básicas, porque temen perderte y por tener que pagar el veterinario hasta perderte...
ResponderEliminarEl Rata como duerme fuera por plasta, se sube en la pérgola del jardín por las gliccinias, escala hasta la ventana de nuestra habitación y practica su tortura favorita:
Arañar los cristales. Práctica que despues de arañar una pizarra es la cosa que más grima me da del mundo.
En ese momento el remedio del Maestro Dess, me parece de lo más conveniente. :P
Besazo hermoso
Eso no lo puedo hacer porque no tenemos pérgola y mucho menos gliccinias.
Eliminar¿Secundas la moción de las croquetas de gato? Tú también mereces bufido.
Pfffff.
Tengo que decirte, Forlán, que estas artimañas no son exclusivas de los felinos. Vuestros archienemigos, los canes, también hacen todo tipo de cosas para despertar al humano/a que con él conviven. Jarete se sube a la cama de un salto, te relame (qué grima me da a veces, por dios), se acurruca hasta casi tirarte... Y lo peor es que con ellos te tienes que levantar, vestirte y sacarles a pasear para que hagan sus cositas... Luego subes a casa, le pones el desayuno... y, ¿qué hace el bueno de Jarete? Tumbarse en su sofá y dormir toda la mañana. A veces tienes que controlar tus deseos humanos de lanzamiento de perro por la ventana, no te digo más...
ResponderEliminarPero él a lo mejor tiene la necesidad imperiosa de salir a la calle en ese momento. Nosotros lo hacemos sólo por molestar. Eso suma puntos.
EliminarPrrrrr.
Tengo que decirte, querido Forlán, que estas artimañas no son exclusivas de los felinos. Vuestros archienemigos, los canes, también las practican. Jarete, mi podenco, se sube a la cama de un salto, te requetechupetea, se pone encima de ti todo lo grande que es, lo del culo en la cara también lo practica... y lo peor es que con ellos, el humano se levanta y se tiene que vestir y sacarles a pasear haga frío o calor, para que alivien su vejiga y su estómago. Luego, Jarete y su humana volvemos a casa, él desayuna... y, ¿qué hace el bueno de Jarete después? Dormir en su sofá toda la mañana. En ocasiones, esta humana que suscribe, tiene que contener sus ansias de lanzamiento ventanil perruno, no te digo más...
ResponderEliminarPues lo dicho...
EliminarJajaja... yo digo como Bionda, a ver si un día de estos decide vengarse y cuando mas plácidamente dormido estés en tu siesta vespertina, te la encuentras mordiéndote la oreja o haciéndote cosquillas...
ResponderEliminarRascaditas.
Eso a veces me lo hace el consorte. A la bruja la tengo dominada y le riñe diciéndole "Déjale dormir, pobrecito..." Juasjuas
EliminarPrrrrrr.
¡Eres maquiavélicamente listo!
ResponderEliminarApunto una nimiez que Efi hacía, a este amplio despliegue tuyo.
Cuando ya estaba muy impaciente, había probado de todo incluidos maullidos de todo tipo, y sólo conseguía un "espera ahora voy pequeñiña" empezaba a ¡suspirar, lo juro! y a agitar el rabo de un lado a otro.
Ese golpeteo constante en el cabecero, mesilla y cara porque lo hacía sentada en la almohada, acababa poniéndolos de pie.