Lo que me ha pasado con este anuncio es un misterio. Lo vi
en la tele, lo busqué en Tú Tubo, lo encontré y, ahora que lo he vuelto a
buscar para presentároslo, ha desaparecido. Pero bueno, confiemos en que mi
prodigiosa memoria no me permita saltarme ningún dato importante. No es que
haya mucho que recordar, tampoco; para qué vamos a engañarnos.
Una mujer con un vestido blanco entra en una tienda que no
sé si se supone que es una perfumería. No va sola. La acompaña un osito de
peluche semoviente. El mismo osito de
peluche semoviente que hemos estado viendo durante generaciones dando saltos
sobre la ropa recién planchada o hablándonos de lo suavecita y bien oliente que
queda la ropa usando su suavizante. Sí, ese osito de peluche que era más gordo
durante nuestra infancia pero luego fue sometido a la dieta Dukan o vete a
saber a qué y ahora está más estilizado para adaptarse mejor a los cánones
actuales.
El caso es que la mujer y el osito entran en la, digamos,
perfumería. Allí no les recibe un ser humano sino un hombre que en realidad es
un dibujo animado. Lleva gafas para parecer más creativo. El hombrecillo se
pone a adicionar mejunjes en una botella con cara de estar creando el mejor
perfume del universo mientras explica el proceso con un acento que pretende ser francés pero que más bien suena
a alemán del extrarradio. Creo que tiene complejo de Jean-Baptiste Grenouille. Sólo espero que
no le termine dando por descuartizar a la mujer para hacerse con su esencia. Termina
el hombre de preparar su poción mágica y de la botella salen montones de flores
que, al volar por el aire, se posan
delicadamente sobre el vestido de la mujer, que ahora luce unos floripondios
azules de lo más horteras. Ella, no obstante, está encantada con su nuevo look
y, sobre todo, con la fragancia que ahora se desprende de su ropa. Me da a mí
que va a ir por la calle apestando al personal parisino (sí, la escena se
desarrolla en París, como no podía ser de otra manera).
Y os preguntaréis qué pinta el osito semoviente en todo esto. Pues parece que sus días de gloria han pasado a la historia y, tras
haber dilapidado la fortuna que hizo en sus días de fama saltando sobre la
ropa, ahora tiene que malvenderse ejerciendo de oso de los recados para la
parisina tirana, quien lo utiliza para que le lleve los paquetes.
Siento ser yo quien os dé estas terribles noticias pero
considero que teníais derecho a saber qué había sucedido con la vida de este
oso que fue todo un símbolo en nuestra infancia. Nadie escapa al afán
destructor de la fama: Le pasó a Lindsay Lohan, le pasó a Macaulay Culkin y el
osito ha sido la última víctima de la fama despiadada.
Se rumorea que fue visto en fiestas salvajes con la oveja del
jabón para prendas delicadas.
Jajajja, creo que lo vi una vez pero medio de refilón. Pobre osito, es que eso de ser osito prodigio es lo que tiene... luego creces y ya no es lo mismo :)
ResponderEliminarBesos!
Ya ves, el pobre, malviviendo de lo que puede. Jajajaja.
EliminarBesotes!!!
Ains, con lo que me gustaba a mi el osito cuando era peque.
ResponderEliminarBueno, al menos va de recadero y no ha quedado endrogao, como los otros que has nombrado!
Muaks
Oye, de tanto esnifar suavizante a lo largo de los años no estoy yo muy segura de que no haya quedado endrogao...
EliminarBesotes!!!!
Vi este anuncio ayer por primera vez XD
ResponderEliminarCon lo que molaba el osito de pequeño... por alguna razón lo recuerdo azul, vaya usted a saber. Por cierto, yo también pensé lo de Grenouille :)
¿Azul? No me suena, pero lo mismo para alguna variedad sí que le hicieron cambiar el look. Jajajaja.
EliminarEs que creo que es casi imposible, conociendo al personaje, no hacer la comparativa con Grenouille. Besotes!!!!
A mí ya me pilló bastante mayor ese oso y la verdad es que siempre me puso muy nervioso su ñoñez.
ResponderEliminarBesos.
A mí me gustaba. Claro que yo crecí con él, pero no me parecía taaaan ñoño. Creo que se volvió más ñoño con los años.
EliminarBesotes!!!
Qué duro es el ocaso de los artistas. Al menos tiene trabajo. ;) Un beso.
ResponderEliminarPobrecito, para lo que ha quedado...
EliminarBesos!!!
Seguramente su club de fans se alzó para defender al pobre osito de la tiranía de la parisina y lograron liberarle con la consiguiente eliminación del vergonzoso anuncio
ResponderEliminarNo sé si seguirá teniendo club de fans. Está muy a venido a menos, el pobre...
EliminarBesotes!!!
Sabes que me diviertes mucho con tus post, eres genial escribiendo, besos
ResponderEliminarBueno, genial era Tolstoi pero gracias!! Jajajaja.
EliminarBesotes.
Hay publicistas que fuman algo, seguro.
ResponderEliminarAbrazo de oso.
Y algo caducado, además. Jajajaja. Besotes!!!
EliminarNooooooooooooo, yo tenía su peluche, y un llavero, ahora a ver como supero eso.
ResponderEliminarY encima con la oveja del jabón de prendas delicadas, ese dulce corderito también se ha echado a perder.
Besinos.
Una pena todo, una pena. Jajajaja.
EliminarBesotes!!!
He visto una versón reducida con el vestido de floripondios pero sin el perfumista raruno. Y sí, confirmo, el oso tuvo un rollo con la oveja. Lo contó en una entrevista la vaca a la que le hace gracia todo.
ResponderEliminarUn beso!!
Que también está más flaca porque ahora come queso light. ¿Dónde vamos a parar?
EliminarBesotes!!!
Jajajaja anda que no me reí hoy. Mira, yo siempre temí que el oso se fugase con la oveja montados en el hipopótamo. Habían desaparecido todos y ahora incluso borran pruebas de su existencia
ResponderEliminarBesos
Es una mano negra!!! Jajajaja.
EliminarBesotes.
que vaya con cuidado el oso, como lo pillen los indigentes de parís (que no son pocos) lo cortan en trocitos ¬¬u
ResponderEliminarAy, qué imagen tan gore... Besotes!!!!
EliminarPara lo que ha quedado el pobre! !
ResponderEliminarYa ves. Da una penita...
EliminarBesotes!!!
Jajajaja, qué bueno. Y yo que me he perdido la horterada por andar por estos lares. Por cierto, me ha encantado lo de "tu tubo" y lo del osito semoviente, jajajaja, qué risa.
ResponderEliminarUn besazo
Yo es que digo cosas muy raras. Jajajaja. Besotes!!!!
EliminarPues me encantan ;)
EliminarTú, que me lees con buenos ojos.
Eliminarmuchas gracias! es que los que ganan el dinero rápido se les va aún más deprisa. Pobre oso, espero que pueda rehacer su vida.
ResponderEliminarEstá en terapia, a ver si se repone. Besotes!!!
Eliminarnecesito estar en contexto. pero mientras hablabas de el comercial pesadillesco y el oso yo me remití a uno que existía como simbolo de una tienda departamental de estos lares llamada Liverpool (la tienda) y el oso Bolo
ResponderEliminarque por cierto tenia una sprimas que para todo lo llevaban como su bolso cuando apenas tenian 5 o 8 años aunque ya fuera mugroso jajajaja
... ahora ya cambiaron el oso, l bolso por un marido
:O
que oooso!!!! (expresion mexicana que se remite a sorprenderte o criticar algo que hace alguien como el roidiculo)
:P
Conocía la expresión y me hace mucha gracia. Jajajaja.
EliminarEl oso de Liverpool también me suena ¿Es marroncito? Podría buscarlo pero entonces sería hacer trampa...
Besotes!!!
jajajajaja que crack! Lo de la dieta Dukan para adaptarse a los nuevos cánones ma matao jajaja
ResponderEliminarPobre osito. Yo reconozco que cuando era una cría le decía a mi madre que quería el osito, y se lo pedía a los reyes magos, pero nunca cayó. Un año, me regalaron uno muy parecido y mis padres pensaron que daría saltos de alegría (tendría yo unos cinco añitos) pero yo me quedé muy despagada y cuando me preguntaron si no me había gustado, les dije muy seria, es que yo quería el de verdad! Ya ves tú, ese ni hablaba ni daba saltos ni na...;-)
Besos mil
Claro, es que no es lo mismo si no parece un saltimbanqui encima de las toallas. Yo también me hubiese llevado una desilusión tremenda. Jajajaja. Besotes!!!!
EliminarPobre oso... aunque yo también lo recordaba azul.
ResponderEliminarBesotes!
Ya me está queriendo sonar la cosa. Tendré que rebuscar a ver si lo encuentro en azul.
EliminarBesotes!!!